Veo dos bebes, dos vidas en diferentes empaques, si los cortas sangran, si los lastimas lloran, si les da hambre se desesperan, si los abandonas sufren. Veo dos seres que nacieron sin pedirlo y que a partir de ahora van a luchar por sus vidas; veo seres inocentes libres de alguna maldad susceptibles de tener una mala educación, un mal ejemplo o que les toque crecer entre alguna cultura ignorante que los desvíe de actuar en el camino del respeto.
Ninguno de los dos merece algún maltrato, los dos merecen vidas dignas, los dos son dueños de la misma tierra que los creo.
Los dos merecen crecer en un hogar lleno de amor y respeto, los dos merecen tener una vida digna sin sufrimiento, sin carencias.
Los dos merecen tener quién vea por ellos y les enseñe a ser felices.
Enseñemos a respetar la vida...
Cortesía de Ruth Bompart Rivera
Ninguno de los dos merece algún maltrato, los dos merecen vidas dignas, los dos son dueños de la misma tierra que los creo.
Los dos merecen crecer en un hogar lleno de amor y respeto, los dos merecen tener una vida digna sin sufrimiento, sin carencias.
Los dos merecen tener quién vea por ellos y les enseñe a ser felices.
Enseñemos a respetar la vida...
Cortesía de Ruth Bompart Rivera